sábado, 17 de abril de 2021

Se amable porque todo el mundo libra una dura batalla

     Sócrates, el gran filósofo de occidente nos dejó esta frase, "Se amable porque todo el mundo libra una dura batalla".
El maestro no nos dejó ningún escrito pero su discípulo Platón y posteriormente Aristóteles, los recogieron.
El hablaba de tres temas principalmente que consideraba importantes, Justicia, Belleza y Verdad.

El mundo de hoy en día no es siempre amable, todos vamos corriendo, luchando por nuestras agendas y cualquier imprevisto puede ser un gran obstáculo para lograr cumplirlas, por ese motivo nos hemos vuelto un poco despiadados con los otros.  En el coche, en la cola del supermercado, en un aparcamiento, todo se convierte en una carrera de obstáculos contra lo que tenemos en la cabeza proyectado para la hora siguiente, pero creo que en realidad no somos así.  El estrés, las prisas, las presiones nos hacen así.

Que buen momento es el verano para reflexionar un poco sobre como vivimos con respecto a nosotros mismos y a los demás.   Solo hace falta mirar, si de verdad queremos saber como es la gente, solo hace falta eso, mirar y sentir un poco de compasión.  Todos buscamos la felicidad.  Si alguien toma una decisión errónea yo pienso, "solo quiere ser feliz".  Intento aplicar esto desde que profundicé en el tema a través de un curso sobre la compasión.  Un día se me olvidó cuando un coche me dio un quiebro para meterse por delante mío en un túnel en el último momento,  y pensé  joeeee, y mi hijo, que era pequeño me dijo "mama, tal vez es que tiene mucha prisa".

"Si PUEDES elegir entre tener razón o ser amable, elige ser amable"  (Wonder).
Se amable porque todo el mundo libra una dura batalla y si de verdad quieres ver como es la gente no tienes más que mirar Sócrates (470 a.C. - 390 AC).

Si te ves en elegir entre tener la razón y ser amable, no dudes ser amable.

Escrito el verano del 2019 y publicado hoy con una foto de primavera del 2021.

¡Gracias!


miércoles, 6 de noviembre de 2019

Un día maravilloso


Así es como deberíamos enfocar cada día de nuestra vida... 

Una oportunidad única e irrepetible de vivir experiencias que nunca se van a repetir, y llenarnos con ellas de vida...  
    





Este texto es un monólogo del personaje de "Caye" en la obra de teatro “Princesas” mientras habla con su compañera "Zule"


“ Hay un día, ya verás. Un día que es la leche. (cambio palabra)
Ese día todo es bueno, ves a la gente que quieres ver y comes la comida que más te gusta y todo lo que te pasa ese día es lo que tú quieres que te pase…

…si pones la radio la música que sale es tu canción favorita y si vas a la tele ese día, por ejemplo a un concurso, lo ganas todo, el dinero, los viajes, todo, fíjate bien lo que te digo, todo.

…Pasa solo una vez en la vida, pero nadie sabe cuándo, por eso hay que estar muy atenta, no sea que se te pase.  Es como un desvío.

…Como cuando vas por la carretera y hay un desvío hacia otro sitio, pero que a lo mejor vas hablando por el móvil o estás discutiendo o pensando en lo que sea y no te das cuenta y se te pasa y te jodiste porque ya no se puede volver atrás.

… Pues el día ese es lo mismo, un desvío.  Y es muy importante, porque puedes elegir por dónde va a seguir todo, si por ese camino que es nuevo o no.  Por eso tenemos que estar muy atentas, Zule.  Muy atentas.  Porque hay muy pocas cosas buenas. Y si encima se te pasan porque estás con el móvil o pensando en otra cosa sería una mierda. Una mierda completa.”






martes, 24 de septiembre de 2019

Las expectativas y la realidad

 Tener expectativas está muy bien, generan movimiento, acción, te sacan de donde estas y te llevan a otro lugar, te hace depositar confianza en el sujeto y hacer tu previsión. Pero tener expectativas que no estén alineadas con la realidad de la vida, no es positivo porque generan sufrimiento.

Madurar significa gestionar bien tus expectativas y el concepto de gestionar bien tus expectativas consiste en alinearlas con la realidad.


Es normal tener expectativas, incluso es normal haber explorado ciertas realidades, pero cuando se tienen alta la capacidad de frustración, tras las expectativas no cumplidas vienen nuevas expectativas y tras la nuevas otras y así sucesivamente, alejándonos de la realidad y viviendo en un mundo irreal que nos genera sufrimiento, en forma de ansiedad, estrés u otras patologías con las que muchos convivimos a diario.



Existen realidades que deberíamos ir conociendo y aceptando. En primer lugar pondría la realidad de que todo es cambiante e impermanente desde las emociones hasta las plantas, las personas y las circunstancias. Todo absolutamente todo lo es.  Que lo sea no es malo si tienes el foco adecuado lo malo es no aceptar esta realidad.

Los seres humanos somos adictos al placer, a lo bueno, y queremos siempre que esto sea permanente. Nos aferramos a estos como si lo ganado no lo pudiéramos perder, y cuando cambia sufrimos, porque lo deseábamos mucho ..., porque queríamos conservarlo ..., como por ejemplo la juventud, una relación, la salud.  Sin embargo: 

Existen cosas que si aceptamos que cambian y las conocemos, las valoraremos incluso por ello. 


Lo podemos observar muy bien en la naturaleza.  Todos cuando contemplamos una flor sabemos que se acabará marchitando, eso no nos impide disfrutar de su belleza, ni sufrir cuando se marchita, porque sabíamos y aceptábamos su impermanencia. Pero por ejemplo etapas de la vida como la juventud que siempre idealizamos son a veces difíciles de soltar en profundidad y evocarlas una y otra vez nos da placer, igual que las relaciones, las vacaciones, y otras muchas circunstancias buenas de la vida.

Pero aceptar la impermanencia es lo que en realidad es la madurez.  ¿Es entonces mala la impermanencia?  yo indudablemente diría que no porque es en lo efímero donde reside su belleza, un amigo cuando comentábamos lo bien que lo estábamos pasando un fin de semana y nos lamentábamos de su final, comentaba "si solo comiéramos postre , este perdería su gracia".


Mis claves para alinearte con la realidad:

Vivir con conciencia en el presente.  Tener una mente agradecida y abierta a crecer.  Tomar cada cosa y oportunidad que la vida nos presenta.  Y saber soltarla cuando marcha.  Muchas veces con conciencia y trabajo pero ir aprendiendo a hacerlo.  Ver cada momento como único e irrepetible, cada conexión como y por otro lado sugiero coger con apasionamiento todo lo bueno que nos va llegando, saborearlo, y disfrutarlo como el momento presente del que se trata.







miércoles, 24 de julio de 2019

Un insignificante paso para la humanidad


Un insignificante paso para la humanidad pero un gran paso para mi. Es lo que significa ponerle hoy mi nombre a Coincidir.

Este blog comenzó hace más de 7 años,  desde entonces han pasado todo tipo de inclemencias y vicisitudes personales y tecnológicas, perdí contenidos, abandone su escritura, ... a raíz de que una persona leyera mi blog, me surgió un trabajo, luego otro y luego...como diría Perales...en fin, a quien le importará lo que pasó...

Durante años lo he tenido muy muy abandonado porque he dedicado mi tiempo, sensaciones, aprendizajes y esfuerzos a otras empresas y personas,  me convertí en personal brander, empoderando a otros para que compartieran su esencia desde la transparencia que da ponerle tu nombre a tu marca, pero abandonando la mía, la más básica que es dar la cara en este blog en el que comencé.  No me he dado ni el tiempo ni el permiso de hacerlo.   Y simplemente hoy lo encontré y hoy me lo doy.

Tras este blog vinieron otros, otras webs, otras labores, pero este es el más mio, el más imperfecto y el más transparente de todos.  

Este año una amiga que conoce mi trabajo, gran persona, me presentó a una universidad para dar una clase en un Máster sobre Marca Personal,   y...tuve que impartir las 6 horas de clase con la extraña explicación inicial de que yo no la tenía por no haber tenido el tiempo suficiente para desarrollara.   Y en fin, se lo debo a ellos, a mis alumnos, a Reme, a mi amiga Olga y a mi misma.

Espero que no cambie la esencia de este espacio, pero sobre todo espero retomarlo y volver a disfrutarlo.  



¡Muchísimas gracias!





martes, 7 de mayo de 2019

No se trata de ti, se trata de los demás

Desde que leí y sentí esta frase hace unos días no se me borra de la cabeza... 
"No se trata de ti, se trata de los demás" 

Cada una de estas palabras son en mi plenas como una sinfonía perfecta que llegan a mi corazón con la creencia absoluta de que resumen lo que siento dentro desde hace muchos años.
No hace falta darle más sentido ni atribuirla a unos o a otros, en si misma es tan del ser humano, de mi ser humano.
Leerla y poseerla simplifica o resume el sentido de mi vida.  "Los demás" es un lugar donde se encuentran mis ilusiones, mis fortalezas, mis motivaciones, mis talentos, mi crecimiento interior, mis estímulos diarios.  Tener este foco me hace volver a mi y a mi paz interior.


Llevo tiempo buscando el equilibrio dentro de mi, mi serenidad y a través de la meditación la descubrí hace tiempo.  Lo que ocurre es que para mi no es plenamente satisfactorio porque aunque indudablemente me hace sentir bien frente a lo que sucede a mi alrededor y duerme la ira, la exaltación, te calma el alma (que no es poco) hace que desees estar en ese estado permanentemente, pero no te da la vida y yo quiero VIVIR.



Darme a los demás, encontrarme con ellos cuando me necesitan, buscar el bien para los más frágiles, sentir compasión hacia las realidades de las personas con las que me cruzo en las escenas diarias, si me hace vivir.

Quizás la clave está siempre en la medida, en encontrar el equilibrio entre que te afecten y te muevan las situaciones y que no lo hagan.    No es un camino fácil.  Es un camino de dolor y amor difícil de controlar, pero es la clave de mi vida.

Salirse de uno mismo e ir a explorar el bosque es fundamental,  alejarme para llegar a otro, es sencillamente vital.

"No se trata de ti, se trata de los demás"