Este poema se lo dedica a Modesta, que era también una persona que vivía en la calle, y que un día de frio, murió sola, abandonada, porque nadie la quiso atender. Desde entonces la Comunidad de Sant Egidio la recuerda, para que no olvidemos que hay Modestas a quien mirar y dar calor. Y están tan cerca nuestro...a veces, en el portal de al lado.
DESENGAÑO por Maria del Carmen
A todos los que pasan hambre, frio, angustia y dolor.
A los que sufren y padecen, a los que murieron intentando encontrar una vida mejor.
A los que no tienen un techo que les resguarde del frio, que cuando llueve no se mojen.
Que en las gélidas noches, no pasen frio.
A los que les tieneden esa mano amiga para que puedan comer algo.
A los que viven en la calle que no encuentren trabajo por no poder asearse.
Y en especial a Modesta que por estar en la calle y no tener
donde asearse, la dejaron morir sin atenderla adecuadamente.
A todos ellos mi poesía les quiero dedicar.
Que piensen que no están solos
que siempre hay personas que se preocupan por ellos para que no pasen hambre y no tengan frio.
La vida es cruel a veces, pero también puede ser bella.
Eso lo sé muy bien, porque yo también viví en la calle y recuerdo que por las mañanas me levantaba
tiritando y me iba caminando para buscar alguien que me ofreciera un café para calentarme.
Pero tuve suerte y la vida me ofreció una oportunidad que aproveché y hoy por hoy
puedo contar mi historia para que otras personas aprendan de ella.
Nada hay imposible, todo es posible si luchas por ello.
Y cuando despiertes, el sol brillará de nuevo y una esperanza renacerá.